Lo que dejó la muestra anual de fotoperiodismo argentino (anuario 2009)

El Palais de Glace es unos símbolos de la cultura porteña. Construido en 1911 y pensado inicialmente como una pista de hielo donde se encontraban las clases adineradas de la ciudad, con el transcurso del tiempo y el devenir de la historia argentina se transformó en un salón de exposiciones, en el que se presentan diferentes actividades tales como pintura, escultura, grabado, dibujo, cerámica, arte textil, fotografía y nuevos soportes de una amplia gama de artistas en todo el país. Un conjunto heterogéneo, amplio y enriquecedor que va modificándose con las diversas muestras que se llevan a cabo en este espacio, a cargo de la Secretaría de Cultura, órbita de Presidencia de la Nación.

Durante el mes de julio, el Palais de Glace llevó a cabo la XXI muestra anual de fotoperiodismo argentino en el período 2009 organizado por la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA). Una selección exclusiva de 250 fotografías de reporteros gráficos nacionales, distribuidas en temáticas que estructuraron diferentes historias. En la extensión de la exposición, se pudo dilucidar un marco narrativo prolífico, a partir de imágenes representativas, sobre diferentes esferas tales como política, cultura, deporte, arte, vida cotidiana, naturaleza y espectáculo ocurridas en Argentina y el mundo. Allí se distingue desde el traslado multitudinario de los restos del ex presidente Ricardo Alfonsín hasta el abrazo efusivo entre Diego Maradona y Carlos Bilardo luego de la clasificación del seleccionado nacional al Mundial de Sudáfrica. Desde el interior de una casa crematoria funcionando hasta la fauna autóctona de la provincia de Buenos Aires. Instantes retratados, con la potencialidad que sólo una fotografía puede provocar. Ese flash que inmortaliza una situación, un momento, que quizás puedan pertenecer, por qué no, a la galería de la historia. En un ámbito amable, iluminado, detallista que posibilitó deleitarse con cada una de las fotografías. Además, por primera vez, se desplegaron varias charlas de especialistas con el público, intentando analizar la función del fotoperiodismo y su rol a nivel social y cultural.

La historia de la muestra data desde la última dictadura que asoló nuestro país. Desde aquellos tiempos de resistencia se organizaron varios fotógrafos gráficos que luchaban por la libertad de prensa, intentando desterrar la censura imperante impuesta por Videla y cía. Como resultado de esa lucha, surgió la primera edición que se tituló como “El Periodismo Gráfico Argentino“. Lo presentaron, de un modo casi clandestino, en un sitio de poca capacidad, donde los asistentes pudieron contemplar las imágenes que en medio del horror los diarios y revistas no publicaban.

Interesante resulta al introducirnos en el espacio que abarca esta muestra, profundizar conceptualmente el prólogo escrito por el historiador y periodista Osvaldo Bayer, enmarcado en una de las paredes, que provoca la atención de los visitantes, quienes leen detenidamente los distintos conceptos propinados por Bayer, claro y conciso sobre la importancia de la fotografía en el periodismo, de su significado, de su vitalidad en clarificar la realidad con un simple pantallazo. Un plus de calidad, una joyita que propuso esta exposición, de acceso libre y gratuito, que regó de talento y calidad la ciudad de Buenos Aires.