
La sombra. A Federer, más allá de la derrota, se quedó nuevamente con la sensación de que tuvo varias oportunidades para al menos quedarse con algún parcial y no terminar entregando la final. El nivel del suizo no es el de siempre, tal vez por culpa de la mononucleosis, esa misma de la que no se pudo recuperar totalmente. Le dio claras ventajas a su rival, lo cual en tierra es asegurarse una derrota seguro. Y así fue...
Federer, quien venía superando escollos importantes, tras eliminar al argentino David Nalbandian y al serbio Novak Djokovic, sorprendió al romper el servicio de Nadal en el primer juego, lo que volvió a hacer en el séptimo, pero el español se recuperó quebrando luego en ambos casos y pudo llevarse el set en menos de una hora. El mallorquín comenzó desconcentrado el segundo set, Federer lo hizo con mucha precisión y sacó rápidamente una muy buena ventaja de 4-0. Sin embargo, el suizo empezó a cometer muchos errores no forzados, hizo crecer a su rival y el mallorquín no dejó pasar la chance de dar vuelta el marcador y seguir haciendo historia.
Nadal, el auténtico rey de esta superficie, ha ganado ya 97 de sus 98 partidos sobre arcilla desde que ganó su primer Montecarlo en abril del 2005. Todo dicho...
1 comentarios:
Nadal es imparable en tierra batida. Es una máquina que gana a todos. REsulta increíble con que fuerza y precisión golpea. ES un puro espectáculo.
un abrazo.
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