Caroline Wozniacki, a un paso de ser número 1

Por el reinado de Serena. La danesa Caroline Wozniacki (20), segunda en la WTA, se llevó por segunda vez el Abierto de Tokio (superficie dura) tras derrotar a la rusa Elena Dementieva (10º) por 1-6, 6-2 y 6-3 en un encuentro que se extendió por más de dos horas. Gran triunfo de Wozniacki ante la rusa, quien no había cedido ni un sólo set en el certamen.

La obtención de este título, con dos millones de dólares en premios, le otorgará el espaldarazo necesario para destronar del número 1 a la estadounidense Serena Williams, lesionada desde Wimbledon, objetivo que podría cumplir la próxima semana cuando Wozniacki se presente en Beijing. Con llegar a cuartos de final será primera.

La oriunda de Dinamarca, una de las tenistas más bellas del circuito, mantuvo un rendimiento extraordinario durante este temporada (54 victorias), ya que con el logro en Japón sumó su quinto título en este 2010 y el undécimo de su carrera. Antes se había consagrado en Copenhague, Montreal, New Haven, Pontevedra y llegó a la final de Indian Wells.

La WTA sigue buscando su destino. Sin la luminosidad ni pompa que plantea el ATP con Federer, Nadal, Djokovic, Murray y cía y alejado también de los tiempos de Graf, Seles, Sabatini, estas épocas marcan un predominio avasallador de las rusas, pasando por Sharapova, Dementieva, Petrova, Zvonareva, Kuznetsova y Pavlyuchenkova, todas ubicadas en el top 20.

El surgimiento de Wozniacki, con un tenis sólido, articulado con buenos golpes, fría en los momentos claves y seductora ante las cámaras de televisión le posibilitó en un escaso tiempo colocarse en la vanguardia del tenis femenino en la actualidad. Deberá confirmar con inteligencia y talento esta superioridad vigente sobre sus rivales, para así no caer en las irregularidades de otras chicas que estuvieron en el mismo momento, ya sea Safina y Jankovic, por citar dos ejemplos.

Podremos pensar que, cuando estaban las gigantes que nombramos anteriormente, a la danesa le hubiese costado muchísimo este propósito. Serán suposiciones nomás. La realidad marca, de no mediar inconvenientes, que desde Dinamarca se viene la nueva reina del tenis femenino. A seguirla.