Chino básico

Por primera vez en este blog me voy a referir sobre mis gustos futbolísticos en particular, y no puedo dejar pasar a un jugador que posee una técnica envidiable y un talento innato que riega de virtudes las difíciles canchas de Italia. Está -según mi opinión- en el podio de los mejores jugadores sudamericanos de los últimos 10 años. El uruguayo Álvaro Recoba tiene un sinfín de cuestiones no solucionadas todavía: ¿Por qué nunca triunfó en el Inter? Si fuera tan bueno.. ¿Por qué es suplente en el líder del Calcio? ¿Por qué no lo quieren los grandes de Europa? Realmente no tengo respuestas a esas formulaciones que son ciertas y tienen una gran dosis de realidad. Prefiero disfrutar de un jugador que siente de una manera particular el fútbol, lo practica así por su forma de ser y privilegió en muchas circunstancias el apego a su selección. Ese sentido de pertenencia a su tierra, lo hace más valorable aún. Es el creador de bellísimos goles que están en el recuerdo de muchos (esa escalada desde la propia área chica hasta la contraria amagando a 7 jugadores del equipo rival, dejando atónitos a cada uno, cuando jugaba en Nacional) quedará en mí para siempre. Esa es la esencia del fútbol. En estos tiempos, que se privilegia a tipos que corren, pero no saben para qué ni para dónde, quiero darle un espacio a estos tipos que juegan como lo sienten, y no les importa perder 100 pelotas, si el objetivo es darle un toque distintivo a una jugada. No peco de romántico. Simplemente le hace bien al fútbol. A todos.