La verguenza ha sido consumada

El torneo de la Primera B Nacional que se desarrollará a partir del 11 de agosto tendrá a partir de esta temporada nuevo formato, ya que se jugará en dos ruedas, todos contra todos, y únicamente con público local.
La primera rueda se llevará a cabo del 11 de agosto al 8 de diciembre y la segunda, del 9 de febrero al 14 de junio del año que viene. A la primera división ascenderán los equipos que finalicen en primer y segundo lugar en la tabla de posiciones, mientras que los que terminen tercero y cuarto jugarán la Promoción frente al 18vo. y al 17mo. de la categoría superior, respectivamente. Los dos últimos en la tabla de promedios perderán la categoría. En tanto, los que ocupen el 17mo. y 18vo. lugar en esa tabla se medirán en la Promoción frente a un equipo del Torneo Argentino A o de la B Metropolitana.

El título de este post representa lo que significa el momento actual del fútbol argentino. La AFA manejada como siempre por el inefable Julio, quien en más de 25 años al mando del ente supremo del fútbol criollo, jamás pudo solucionar el tema de la violencia. ¿O no quiso hacerlo?. Muchos dirán que le conviene para su bendito contrato con la televisión que la gente tenga miedo de ir a la cancha. En este mundillo de la inseguridad (decirle seguridad a esto, me resulta demasiado fuerte) han pasado distintos tipos de personajes: Mario Gallina, el cual se lo nota muy apesadumbrado por la escalada creciente de violencia, pero que con eso sólo no alcanza. Él tiene que ser el encargado de organizar mejor los operativos, de hacer que la gente vaya con confianza a la cancha porque la Policía lo va a cuidar. No suena tan loco. Tiene que ser así, no me vengan a hablar de operativos exitosos, es normal que nos tengan que cuidar. Es su responsabilidad. Gallina, junto a Javier Castrilli, eximio árbitro que ahora hasta tiene un triste papel televisivo en un programa de TyC Sports, canal que pronto transmitirá absolutamente todos los partidos del torneo de Primera, sigue siendo un defensor recalcitrante de la mano dura, de llevar causas y salir en los medios, pero que a su vez en un partido en Capital Federal (su distrito) hieren a un hincha y lo dejan desangrado 20 minutos por la ineficiencia policial, la cual no va a pagarle la vida de esta persona a su familia. Sin embargo, Castrilli analiza las circunstancias y da la conclusión de que si hubo mala tarea policial va a haber castigos. Nunca va a decir que posiblemente hayan fallado sus acciones para detener la violencia. Y por último, ¿Qué estudió para ser especialista en estos temas? Que alguien me lo aclare...

Entonces: ¿Para dónde vamos? Ahora quieren que no haya público visitante (siguen matando al fútbol y ni se mosquean), de organizar al fin un torneo como la gente, de dos ruedas y a partir de ahí ver los resultados. Y encima con descuentos de puntos para Nueva Chicago y Almirante Brown, equipos que tendrían que estar desafiliados de la AFA por un largo tiempo, lo cual hace que realmente esto se parezca a un circo. Un circo triste, porque como siempre los muertos siguen. Aunque ellos -sabemos quiénes- sigan haciéndose las víctimas. ¿Paradójico no?