Por demás válidas resultaron las declaraciones del Papu a distintos medios, donde argumentó cuestiones familiares muy profundas que no son escuchadas cotidianamente en un ambiente plagado de tipos que dicen siempre lo mismo y "el tenemos que laburar para mejorar". "Es un momento horrible, no se lo deseo a nadie. Me cuesta levantarme para ir a entrenar, pero hay que dar la cara. Tal vez algunos se callan, pero yo tengo otra personalidad y lo que pasó fue una locura. Se piensan que venimos de otro planeta. Con 21 años, yo mantengo a mi familia. Mi hermano era drogadicto, estuve peleado con mi hermana y hace 15 años que no veo a mi papá". Ya sé, estamos en un fútbol hiperprofesionalizado, de millones y millones de dólares en danza, que supuestamente no debería permitir esta clase de excusas, tan esenciales para un ser humano. Sin embargo, no debemos olvidarnos que Gómez es un joven de 21 años. Apenas eso. Con problemas de familia en sus espaldas y siendo el único sostén económico sería sumamente interesante que San Lorenzo le otorgara otras posibilidades, tales como la inserción en terapia con un profesional para el propósito de resolver los problemas que surjan y de ese modo liberarlo de la mochila que viene cargando hace tiempo. Fijarse más en el Alejandro Gómez persona, que en lo que haga en el campo de juego. Quizás una cosa lleve a la otra. Ayudarlo, comprenderlo, explicarle que más allá de las exigencias coyunturales hay un club detrás que lo apoya. Que confía en él.
No es crispación, palabra de moda en términos mediáticos, de la sociedad. Ese chamuyo ventilado las 24 horas por los medios de comunicación no cuenta con verdadero asidero para explicar esta realidad que también se repitió con lo acaecido con Matías Giménez y su encuentro con varios simpatizantes de Tigre. Los hinchas, vos, yo o el que fuese tenemos que comprender que más allá del póster, detrás del éxito y también del fracaso, hay personas de carne y hueso. Sí, personas que se equivocan y aciertan. Personas como vos y yo. Y que definitiva esto es fútbol, no la guerra.
14 comentarios:
Es tristísimo cuando pasan estas cosas. Lo del Papu es vergonzoso, y lo de Matías Gimenez... bue. Hay gente que tiene mierda en la cabeza.
Y el Papu me cae moooy bien. Si quiere venir a Racing a no rendir, yo lo banco!
Saludo!
Me pareció excesivo y exagerado ahora poner como ejemplo al Papu Gómez, que seguramente tiene tantos problemas como la gente común, como yo, como los mismos desubicados que lo putearon.
Ya directamente lo victimizaron, cuando en él no ví nada de autocrítica sobre hacerle gestos a la gente que lo insultó de arriba a abajo.
Destierro totalmente a los insultos en la cancha, alocados y el desubicado que lo increpa en el estacionamiento ni qué hablar.
Pero nada justifica al Papu hacerle gestos a la gente, si no te gusta que te insulten, vos tampoco devuelvas con la misma moneda, porque es peor y habla también mal de él, que es un pibe de 21 años que tiene mucho qué aprender todavía.
Está todo muy podrido y todos debemos hacernos cargo de lo que c/u hace, pero no lo victimicemos tampoco y lo pongan como un héroe.
¿La gente puede putear de arriba a abajo, puede decir las cosas más hirientes (porque todos sabemos que, cuando hay ganas, nos podemos ir al carajo), y en ciertos extremos casos puede amenazar a los jugadores, pero éstos no pueden descargarse haciendo un simple gesto? ¿Por qué no? ¿Incita la violencia? Dejémonos de joder...
Bue, yo no opino igual. No me parece que hacer gestos hable mal del Papu ni de nadie, al contrario. Podría tranquilamente cagar a tiros a toda la platea y sería casi correcto.
El hecho de haber pagado una entrada no nos da derecho a hacer lo que se nos cante el culo en la cancha. Que el "futbolismo" no nos haga creer que los jugadores, simplemente por ser jugadores argentinos, tienen que aprender a bancarse todos los caprichos, insultos y aprietes de una hinchada.
Ahora resulta que el Papu Gómez es una víctima, un héroe? Mirá vos... Sabés que hay gente, que paga una entrada con lo último que le queda hasta cobrar. Que viaja un montón de kilómetros para ver a esos muertos. Que hace sacrificios para ver los deprimentes partidos. Pero el Papu es un héroe... No, mirá. Si Gómez tiene tanto problemas, que se retire (con lo que ganó seguramente ahorró)por respeto a la gente. Si está tan afectado, que vaya al psicólogo (con lo que gana seguramente podrá pagarlo) Y si no puede con todo, que se mate (con lo que factura, seguramente podrá pagarse el sepelio) Este es el país de los boludos, que mientras en Arsenal le iba bien nunca dijo nada. ¿O el hermano es falopero desde que está en San Lorenzo? ¿Oel padre se piró desde que juega en el ciclón? Solo son excusas de un vivo que se lleva la guita en pala y juega para el orto. ¡Ojo! No soy de SL, pero es lo mismo que sucede en River. Y por supuesto que el Papu puede gesticular lo que quiera, pero eso debe sostenerlo en la cancha. En este país, los brabucones, los "porongas" son de pico nada más y a los pingos se ven en la cancha. Si al Papu no le gusta, que devuelva todo lo que cobró hasta ahora y vaya a trabajar haciendo zanjas, ahí no lo van a putear y va a poder jugar un picadito con los amigotes... Esto es fútbol profesional, donde estos personajes que ganan fortunas deberían pagarle a los hinchas. ¡Si son horribles!
Que hay gente que paga una entrada con lo último que le queda del sueldo, que viaja, ufff, cientos de kilómetros, que se sacrifica el alma sólo para ir fecha tras fecha a putear a un puñado de jugadores, es muy cierto... y muy triste, así estamos.
En algo coincidimos, este el es país de los boludos. Los técnicos y jugadores no son los malos de esta película. O, por lo menos, no son los peores. La raíz viene de largo y hace rato.
El Papu no es un héroe, es una persona, por dios. Con guita o sin guita, con problemas o sin problemas, no entiendo cuál es la necesidad de extremizar todo tanto.
Si para hablar y gesticular tenés que sostenerlo en la cancha, dale, vamos todos a jugar en primera a ver cómo sale. Basta de exigir que "profesional" sea sinónimo de "perfección". Un profesional sigue siendo un ser humano, con errores, con torpezas, con problemas y con las pelotas llenas.
Los jugadores son jugadores y los hinchas son hinchas. No hay que mezclar las cosas. O si no esperemos a que aparezca uno a gritarle a la popular: "CANTEN PUTOSSSS!!", y ahí ya no nos queda más nada.
Estoy comentando mucho. Me voy a callar al rincón...
LA VERDAD QUE TODOS tenemos problemas y no es excusa para hacer cualquier cosa.como maltratar al tecnico anterior interino fanesi.
si no le gusta que la gente lo putee que no juegue mas.
El objetivo del post precisamente no quiere ni victimizar ni poner en un altar a un futbolista que como mencioné en el texto ha desempeñado diferentes actuaciones no acordes a lo que se esperaba de él.
Los problemas familiares de Gómez podrían haber estado antes, ahora o después, lo que considero válido es que el futbolista exprese razones por las cuales no se siente feliz jugando al fútbol, y eso es más allá de toda la guita que pueda existir. Lo que sí me parece pertinente es que San Lorenzo tome cartas en el asunto y más allá de ejercer un derecho de admisión para quienes lo agredieron el domingo, también actúe sobre él, con la idea de ayudarlo y superar esta dificultades bajo la ayuda de un profesional.
Comparto como dice Darilo que los gestos no fueron adecuados. También comprendo las pulsaciones, el nerviosismo de una goleada en contra, etc, lo que no equivale, vale aclarar, una reacción así. También el club deberá mostrar mano dura a futuro (cosa que no demostró nunca) para que los futbolistas sepan que hay límites que no se deben superar.
El tema es muy arduo, me pareció muy interesante las diferentes posturas de todos y eso básicamente nos enriquece.
Yo no coincido, NoTe. Es mi especialidad, jeje. Para mí es muy hipócrita pedir que "si no le gusta que la gente lo putee que no juegue más".
Cuando sale un jugador a hacer un mínimo comentario sobre la gente (saliendo en defensa propia) se arma un quilombo bárbaro y (con toda razón) le hacen la cruz eterna. Pero cuando los jugadores son insultados y amenazados, ahhh, se la tienen que bancar.
Ojo, no estoy hablando de los insultos típicos pasionales. Repito que soy de Racing, los insultos a los muertos que han pasado por esta institución ya son el pan de cada día, son cosas que te salen de la bronca, de la impotencia. Pero cuando la cosa se vuelve personalizada y sin límites, ahí va más allá del (poco) fútbol que se demuestre en la cancha. Ahí habla de la calidad de hincha como persona. Y dado que que los jugadores también son personas, cada uno tiene su forma de reacción. Algunos serán tranquilos o tendrán la experiencia suficiente como para acostumbrarse a toda la mierda que le tiren. Otros no, por temperamento o por juventud, no importa.
La reacción del Papu Gómez se puede censurar aisladamente, pero en contexto amerita un análisis más amplio, que nos involucra a todos como hinchas.
Y lo que pasó con Matías Gimenez es el ejemplo más claro que determina dónde debería centrarse la atención. Por la seguridad de los jugadores y por la de los hinchas de verdad, a quienes les (nos) recaen las culpas ajenas (ya sea por suspensiones, quita de puntos y partidos a puertas cerradas, por la violencia que se vive en las calles y en los estadios, o por los giles que agarran cuando la policía quiere hacer de cuenta que se hace cargo de las cosas, dejando pasar a los verdaderos violentos).
Saludo!
Y otra cosa, ya que estamos. Los árbitros son un desastre. Los jugadores se tiran ante cualquier posibilidad. Los límites entre lo que es tocar y golpear son una neblina eterna. Le pegan un rodillazo en la nariz, lo dejan sangrando de por vida y salen a reclamar que no lo tocaron. Nadie hace ni dice nada. Ni con los árbitros, ni con los jugadores. En el campo se vale todo. Pero afuera nos ponemos quisquillosos...
La violencia está en todos lados. La culpa la carga cada uno. Mientras tanto, arriba se hacen los boludos.
Creo que el Papu hizo reflexionar a varios con lo que dijo. Yo lo felicito. Los hinchas del futbol argentino y me incluyo (aunque no vaya a la cancha) muchas veces nos pasamos de la raya. Lamentablemente entendemos este deporte como una cuestion de vida o muerte. Lo tenemos demasiado arraigado.
Un saludo.
Pola totalmente de acuerdo con el tema de los arbitrajes. Tal cual es como lo planteás. Además no hay respeto por el colega, de que a quien lesionás hoy puede ser tu compañero a futuro. Así está la sociedad. Saludos a todos!
Tiene que haber límites. El insulto es parte del fútbol, cosa que no está mal, de todas maneras un hilo muy fino lo separa de la violencia directa. De todas maneras, ¿cómo se expresa el enojo ante un jugador que hizo TODO mal adentro de la cancha en TODOS los partidos?... así no, yo prefiero insultarlo en mi anonimato, sin trasgreder ese límite, ojala que ese límite se puede afianzar en todos lados
yo lo amo a el papu es mi idolo aunque lo puteen o dijan cosas de el yo lo voy a seguir amando no me importa nada de lo que apse lo unico que me importa es el
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