Por la plata baila el Mauri...

El delantero Mauro Zárate se marchará a jugar al poco competitivo fútbol de Qatar y abandonará Vélez, que recibirá alrededor de 16 millones de dólares por la transferencia. Por tal motivo, el atacante no intervino en el partido de hoy, por la última fecha del Torneo Clausura. De acuerdo a lo revelado por el propio jugador, el club que adquirirá sus servicios es Al Saad, el mismo que dirige el uruguayo Jorge Fossati (ex DT de Colón) y en el que hará dupla de ataque con el ecuatoriano Carlos Tenorio. "Voy, firmo por dos años y regreso para jugar en el seleccionado Sub 20", confesó el delantero, de apenas 19 años. En principio, Zárate iría al fútbol qatarí (en donde concluyeron sus respectivas carreras, por ejemplo, Gabriel Batistuta y Claudio Caniggia), junto a su hermano mayor Rolando, también ex Vélez y de último paso por el fútbol mexicano. Sin embargo, el Roly se incorporaría a otra institución de la ciudad de Doha. Mauro viajará el lunes a Qatar a "finiquitar detalles del contrato", aunque advirtió: "luego regreso para entrenarme con el seleccionado", en referencia a su próxima participación en el Mundial Sub 20 de Canadá, que empezará el sábado 30. "Ojalá salga todo bien. Después de dos años me gustaría saltar a una liga importante de Europa".

Cómo le gusta la plata a determinados jugadores. En estos tiempos, no voy a sorprender a nadie diciendo que el fútbol se ha transformado en un negocio. Pero hay límites. Puedo entender que a ciertos jugadores que ya están en la curva descendente de su carrera logre seducirlos el fútbol de Qatar, plagado de millones de dólares pero nulo en cuestiones de rendimiento. Por esa razón fueron Batistuta, Cannigia, Lebouef, Effemberg y tantos cracks ya al borde del retiro. Pero que Mauro Zárate con apenas 19 años y todo un futuro por delante, decida tirar a la basura dos años de su carrera por una oferta que entendemos que es irrisoria en lo económico pero desechable en términos de fútbol suena a poco inteligente. Con el fútbol, Mauro habrá soñado triunfar cuando era chico, cuando daba sus primeros pasos en las inferiores en Vélez . Tal vez sea yo un tonto y siga viendo las cosas románticas del fútbol, del objetivo cumplido, de la gloria, en fin de cuentas de amar lo que uno hace. Tal vez me dirán que con lo que va a ganar se va a salvar toda su familia, nietos y demás árboles genealógicos, pero esos nervios al entrar a la cancha, esas ganas de jugar en tu país, en la Bombonera, en el Monumental, viviendo como protagonista un espectáculo hermoso como lo es el fútbol en nuestro país, se lo va a perder. Como también la posibilidad de ser convocado a la selección, ya que donde va a jugar no llegan imágenes de esos partidos. Es un caso parecido al de Pisculichi, aquél elegante enganche de Argentinos, quien teniendo una titularidad constante en Mallorca (aclaro, primera división de España) se fue a jugar a esa Liga por lo económico. Le hicieron una nota en el Diario Olé y ni sabía como se llamaba el técnico. ¿Tanto aman la plata? ¿Tanto es la diferencia económica con un equipo de Europa? Ellos van allá a estos lugares, pero quieren que Europa les abrá luego la puerta. No se dan cuenta de que yendo a Qatar se cierran las puertas ellos mismos. Eso sí, con la billetera muy gorda de dólares. A esta clase de jugadores, nunca le crean cuando se besan la camiseta, porque debajo de esa hay una de color verde.